miércoles, 30 de junio de 2010

Aparentemente Perfecto.

Iba feliz caminando, por un sendero que aparentemente no tenía fin. Pensaba en tantas cosas y lo mágico es que ninguna de ellas era mala, no había alguna cosa negativa en mis pensamientos, era raro. Mi vestido era blanco invierno, no traía zapatos, el pasto era muy verde y el sol brillaba como nunca. Algo en todo esto me parecía extraño y reconozco que me tomo un tiempo reconocerlo. Era invierno. Cómo podía andar con vestido y sin zapatos en invierno? Cómo el césped tenía flores por todas partes y el sol brillaba como si fuera verano?. No pensé mucho mas en eso y seguí caminando, sin rumbo alguno, sólo caminaba. De pronto, en el momento menos esperado, menos deseado, el sendero terminó. Pero yo seguí terca caminando, resbalé, y caí. Entonces desperté y me di cuenta que todo aquello era un sueño que me intentaba explicar cómo es la vida en realidad. A veces ella se hace parecer perfecta y, cuando menos lo quieres, menos lo esperas su máscara desaparece, y en ese momento, la cruda realidad se presenta frente a tus ojos.



Paz.

domingo, 27 de junio de 2010

Ilusión, desilusión.

Todos vivimos de la corta, cierta y vital palabra: ilusión. Qué pasaría si un día esa palabra dejara de existir? Creo que no podríamos vivir. Como una rosa, nos marchitaríamos. No existirían los sueños, los proyectos, las esperanzas; qué sería del anhelado futuro?. Si esa palabra no estubiera en el diccionario muy pocos valientes seguirían de pie, batallando contra el destino que a veces no nos entrega sus mejores jugadas. No estaríamos luchando por algo sin un objetivo final, por alguien, o por nosotros mismos.
Sin las ilusiones rotas no creceríamos como personas, no maduraríamos, no entenderíamos que la vida no sólo tiene cosas dulces sino que también tiene amargas. No saldríamos de nuestra burbuja, de nuestra perfecto cuento de hadas, si no existiera el enemigo de la ilusión. En fin, creo que la palabra desilusión nos hace más fuertes, nos hace aprender, comprender por qué no siempre todo es como deseamos, como planeamos, pero también hay que tener cuidado y saber emplearla, que nos puede derrocar la vida y peor aún, destrozar el corazón.




Paz.

sábado, 26 de junio de 2010

Escribir.

Escribir es lo que más me gusta hacer, lo descubrí por casualidad un día y desde ahí no he parado. Me hace sentir tan bien, me desahogo haciéndolo, y, aunque sé que soy una de las miles de personas que escriben, que no soy tan buena, que escribo cosas tristes y solitarias, me gusta, me encanta. Por lo mismo me gusta conocer personas por msn, escribiendo. Creo que uno a través de la pantalla se muestra tal cual es, sin verguenza de hacerlo, incluso, nos podemos conocer más de lo que nos conoceríamos en vivo y en directo.


Él nunca supo por qué lo hizo, simplemente, lo hizo. Venció su timidez, su indiferencia respecto al tema y tomó prestado un contacto de su amigo; sí, ese día él se encontraba con su amigo en casa. Mientras su amigo miraba la televisión, él se encontraba en el computador. Ambos tenían sus msn online. De pronto, apareció una ventana en la derecha de su pantalla, a él algo de aquella fotografía de presentación le llamó la atención e hizo clic para ver quién era, pero no la conocía. Tomando en cuenta eso, la agregó, un sexto sentido quizá le dijo que lo haga. Ella sin obviamente conocerlo, lo aceptó en su pequeño espacio y le dijo: "hola". Así comenzó todo, y desde aquel día no pararon de conocerse, aconsejarse y sin darse cuenta a necesitarse, sí, se necesitaban, se extrañaban, aunque no se conocían físicamente ellos sabían que desde ese primer "hola" todo había sido especial, diferente. Pasaban horas y horas hablando, y un día, ambos se dieron cuenta que se habían enamorado. Nunca se habían visto las caras pero sí se conocían, él sabía que a ella no le gustaba el color rosado y ella sabía que a él no le gustaba el ketchup, él sabía que ella se levantaba despeinada y ella sabía que él despertaba pensando en verla.
Un día ellos decidieron verse, se pusieron de acuerdo con el día, la hora y ambos se sentaron expectantes hasta que llegase ese momento. Bajo el farol azul a las cinco de la tarde se encontraron, y lo siguiente, no estaba planeado. Ella lo miró con sus ojos café cristalino y le dijo: "hola", igual que la primera vez que se conocieron pero ahora no era escrito, sino que con su propia voz, él contempló a la mujer que sin haber visto nunca, amaba mas que nada, mas que nadie y sin responderle el saludo, la besó.



Paz.

viernes, 25 de junio de 2010

3

Y yo le escribo cartas de amor a él, lloro por él, pienso en él y aunque ya no estemos juntos, aún hablo de él, a pesar de todo lo que me hizo, aún no me olvido de él.
Mientras tú, me escuchas, me aconsejas, y por dentro, sí, muy dentro, lloras conmigo. Yo, lloro por el tonto amor que perdí; tú, lloras por el amor que tienes al frente, y que quieres conseguir.
Que tonta he sido en no ver lo mejor y peor para mi, pero en verdad, no es ese el problema, el problema es poder olvidar, una palabra que no cuesta nada decirla pero si mucho practicarla.


De verdad, muchas gracias.
Paz.

lunes, 21 de junio de 2010

Sueños de medianoche.

Desperté, pero no abrí los ojos. Quería ver si manteniéndolos cerrados volvía a tan hermoso sueño. No pude. La oportunidad que el subconsciente nos da de soñar algo es solo una y no hay que desperdiciarla despertando. El sueño era tan real, oh por Dios, tan real, si incluso creo que eso ya nos había sucedido antes o todo lo demás fue un sueño también?. No sé. Nunca sabré. Lo único que si sé es que me hubiera encantado quedarme en ese sueño y no despertar jamás. Tan perfecto, pero era difícil de que ocurriera, el destino no vuelve atrás, el destino es optimista y sólo mira hacia adelante. Lo hecho está hecho, lo pasado ya lo disfrutamos y por más que yo quiera volver a nuestro hermoso pasado, no puedo, cierro los ojos en la oscuridad de la noche y no puedo volver a dormir, no puedo volver a soñar. Qué más me queda? recordar lo que estaba soñando y seguir haciéndolo, pero despierta. Estoy tan loca, tengo la imaginación tan amplia que cualquier cosa que me pida mi alma, mi corazón, mi cabeza, yo me la puedo imaginar. Sí, quizá sea para saciar lo que no tengo, lo que no poseo, lo que perdí, lo que ya no veo... Entonces abrí los ojos, sin ya ningún método para poder ver ese sueño de nuevo, vi qué hora era y cuando me di cuenta que aún me quedaba tiempo para descansar, volví a dormir.





Paz.

domingo, 20 de junio de 2010

La casa roja.

Y él entró, no tocó la puerta sino que simplemente entró. Al parecer algo lo hizo sentir "como en casa". Adentro habían varias personas, muchas, demasiadas, pero aún había espacio para más en ese lugar. Por fuera la casa se veía tan pequeña, pero por dentro, era mil veces mas grande. Las paredes eran rojas, muy rojas, y por ellas corría abundante salsa de frutilla. El joven comenzó a recorrer la casa, para ver si encontraba algún conocido, y encontró algunos, eran personas que él había conocido hace muy poco tiempo, pero al menos eran conocidos. Hablaron un rato, pero luego él siguió recorriendo la casa, buscando algo o alguien, quién sabe.
Recorriendo y recorriendo se encontró con más conocidos, éstos estaban en el piso superior, en el piso donde sólo algunos podían subir y no sé cómo, de qué forma, él lo pudo hacer, sin dificultad y eso que ésta era la primera vez que el conocía aquella casa. El dueño de la casa lo apreciaba muchísimo, sin duda. Así el muchacho, ya dentro de la casa y obviamente en el "exclusivo" segundo piso se sintió verdaderamente como en casa e hizo lo que quizo dentro de ella, luego, un día cualquiera, él decidió salir de ahí, y sin miedos, porque sabía que la puerta de la roja casa estaría abierta siempre para él. Quizá ese fue un gran error del dueño de casa, pero era totalmente inevitable. Después de que el joven caminante dejó la casa, muchas de las personas que se encontraban dentro y fuera de ella se acumularon a ver lo ocurrido, en la última pisada del muchacho, justo ahí, el piso estaba roto, destrozado, y todos los que se encontraban mirando el espectáculo notaron que reparar eso sería casi imposible.




Paz.

sábado, 19 de junio de 2010

Él y Ella.

Estaba ella sentada en la banca de la plazuela, él, a su lado escuchando lo que ella le decía. Se notaba que estaban peleando, estaban enojados y con expresiones tristes. Yo estaba en la banca de el frente, sin nada que hacer, era domingo, noviembre 16 y el aburrimiento me carcomía. En eso me encontraba, viendo y escuchando lo que se decían. Al parecer ella le reclamaba su descortesía, su egoísmo y su falta de hombría. Él se sentía identificado con las palabras de su mujer, pero su orgullo era mayor; le dijo que sólo la amaba a ella, no reconoció ninguno de sus errores y luego, comenzó a echarle toda la culpa a ella. La joven se veía muy triste y decepcionada mientras que su novio estaba helado por todo lo que su amada le decía. Ambos se quedaron en silencio, pero ella con una dura palabra lo rompió. Terminamos. Corto y secante descenlace que a ambos les rompió el corazón, y yo, sin conocerlos lo noté, se veían el uno para el otro pero todos esos errores con su relación terminó. Él se quedo callado y con el corazón de ella en la mano, mientras la mujer ya había desaparecido, se fue, lo dejó, no soportaba más el dolor. Pobres locos enamorados, podrán algún día sanar sus corazones?





Paz.

jueves, 17 de junio de 2010

Lejos pero cerca.


Eran las 11 de la noche, la luz estaba cortada, creo que las cuentas no estaban pagadas. Afuera llovía y yo por la ventana veía el delirio que tenía el cielo. Me hundí en mis sábanas para tener un poco de calor, era invierno y el clima no era de lo mejor. Sonaba el tejado, la casa estaba oscura y vacía, no tenía nada de comer ni tampoco alguien que me hiciera compañía.
Escuché un ruido, me concentré para escuchar qué era y descubrí que eran relámpagos. Me aterran lo relámpagos, pero nadie lo sabía, sólo yo. Para no seguir oyendo todas esas quejumbres del cielo, cerré los ojos y comencé a pensar en mi vida, un tanto solitaria, un poco desgraciada pero al fin y al cabo, mi vida. Entre tanto pensar, meditar y recordar me dormí sin casi tener en cuenta el molesto ruido de los relámpagos, y tuve el sueño más hermoso de mi oscura vida.
Estaba yo en mi casa, sobre la cama, meditando o pensando tal vez, era todo tan blanco, había un gran resplandor, se sentía mi felicidad alrededor.
En mi claro sueño, estaba yo, sólo yo, como siempre ha sido, con un vestido largo y simple, blanco, resplandeciente. Me aproximaba por un camino imaginario a algo, algo bueno, algo perfecto, pero no sabia qué era, sólo veía blanco, blanco y más blanco.
Alzé mi mano para abrir la puerta que había en medio de la nada, pero algo me frenó, intenté salir del mágico sueño pero no podía. Mi subconsciente tenía más autoridad que yo en ese momento. Luego la respiración me comenzó a faltar, pero seguía viviendo, seguía soñando. En ese instante el alma era más fuerte, y por más que traté no pude salir de donde me encontraba.
No tuve más opción que abrir la puerta que estaba frente a mis ojos, asi que lo hice. Quedé perpleja cuando vi toda esa maravilla que estaba frente a mis ojos. ¿Cómo? fue lo primero que me pregunté, siempre estuve tan cerca de ésta felicidad, de todo eso tan perfecto y nunca me dediqué a buscarla. Por suerte mi querido subconsciente me mostró el camino a ella.
Cuando cruce el umbral a la felicidad absoluta sentí el pecho apretado y respiración ya no me quedaba. Intenté despertar pero no pude. Fue imposible.
Y de esa forma mi oscura vida terminó, mi cuerpo se quedó, y sólo mi alma obtuvo el vuelo a la felicidad.
Paz.

martes, 15 de junio de 2010

H U M A N I D A D.

Hace miles de años Dios creó el universo, con un objetivo obviamente, y dentro de el inmenso universo está la tierra. Sí, quizá sea pequeña comparada con otros planetas, pero para nosotros, para mí, es gigante, es mas, nunca la conoceré por completo. Algunos dicen "oh, que chico es el mundo" yo creo que lo chico es su mundo, mas bien, su burbuja.
En este mundo hay pobres, ricos, egoístas, caritativos, altos, gordos, bajos, flacos, morenos, rubios, asiáticos y colombianos. Alguna vez te has preguntado ¿Por qué en este pequeño planeta Dios se dio el trabajo de tener tanta variedad?, hay para todos los gustos, puedes encontrar el clima que quieras, puedes conocer a otro individuo de aquí mismo y tener una familia, enamorarte. Hay que darle gracias a nuestro creador de hacer el mundo "pequeño" como algunos dicen o sino muchas cosas de nuestra vida cotidiana no podrían suceder o simplemente por la lejanía de los lugares, nuestro mundo no sería como es hoy, relativamente unido. También debemos darnos cuenta del daño que le hacemos al mundo, a Dios, por despreciar lo que él con tanta sabiduría nos dio, nuestra vida y nuestro hogar. Cuidemos el mundo, es de todos, no seamos egoístas, porque si ahora el agua no se agota en un par de generaciones más se acabará para siempre y tu nieto o bisnieto no tendrá agua ni siquiera para beber. Ponte en el lugar del otro, luego actúa.



Para mi lector favorito :)




Paz.

lunes, 14 de junio de 2010

i miss you.


Está soleado, cuántos días de verano he pasado ya a tu lado? y no me canso. Te conocí un día inesperado para mí, era el fin del verano, sí, aún lo recuerdo, tu mirada se cruzó con la mía y hasta hoy no se separan. Sé que estás lejos, no puedo verte, no puedo tocarte, no puedo sentirte, pero si puedo recordarte, amarte y extrañarte. Mientras estoy aquí en la arena recostada y los niños juegan cerca del mar, yo, cierro mis ojos y logro ver imágenes de nuestro pasado, las veo, las recuerdo y me emociona saber que nunca me dejarás. No te vayas nunca, no me abandones; sé que físicamente no estás ahora conmigo, pero tu alma yo la tengo, tu corazón está en mi mano y ni el destino ni la suerte se pueden interponer en nuestro camino que ya hemos construido y que estamos por terminar, tú estás ahí, un poco más arriba que yo, revisando cada milímetro para que nuestro amor no tenga desperfecto y así podamos un día alcanzar nuestro cielo, al que tú ya llegaste y que ahora a mi me toca disfrutar. Vivamos en el en paz, vivamos como siempre quisimos, es hora de aprovechar las vacaciones de la vida que Dios nos da. Ven a buscarme pronto, que esta tortura ya no la soporto, creo que extrañarte más no puedo, por eso te escribo esta carta, para hacerte saber mi delirio.
Está soleado, cuántos días de verano he pasado ya a tu lado?...
Paz.

domingo, 13 de junio de 2010

Viento.




Estamos sentados, solos en medio de un campo, de un terreno vacío, no sé dónde estamos es la verdad, sólo sé que me siento segura, estoy contigo. El día está nublado, hay frío, pero contigo nada de eso importa. Las horas pasan volando y yo no quiero que los segundos se alejen de nuestro tiempo.
El viento sopla, con rabia, con fuerza, pero no nos derrumba, nos hace más fuertes, oh si, inseparables. Nos unimos, el viento nos quiere botar, nos quiere separar quizás, no lo permitas que yo no lo haré, nunca. Prefiero que el viento me lleve muy lejos, donde el quiera, pero contigo, siempre contigo.
Sólo sostenme, que yo sola no puedo, no me sueltes la mano, que el viento no te puede vencer...




Paz.

viernes, 11 de junio de 2010

Sé que puedo estar a metros tuyo, sin siquiera verte pero puedo sentir que estás ahí, esperándome. Te he conocido tanto y a la vez tan poco... nos faltó mucho por vivir aún, yo no quería esto, ¿lo querías tú?. Estás al frente mio y no puedo hablarte, no puedo tocarte, pensar que antes era lo primero que hacíamos y ahora, no puedo.
Ya no somos nada pero aún tenemos todo, nos amamos y más que antes, mucho más. Te necesito, no sabes cuánto, ¿no ves que sin ti me estoy muriendo?. Por favor háblame, llámame, piensa en mi, ámame siempre porque si no yo desaparezco y vuelo muy lejos de ti, para ver si algún día logro olvidarte.







Paz.